.146- ¿Quién eres pues tú, Dios mío?
1. ¿Quién eres pues tú, Dios mío, y a quién dirijo mis ruegos sino a mi
Dios y Señor? ¡Y qué otro Dios fuera del Señor nuestro Dios!
Tú eres Sumo y Optimo y tu poder no tiene límites. Infinitamente
misericordioso y justo, al mismo tiempo inaccesiblemente secreto y vivamente
presente, de inmensa fuerza y hermosura, estable e incomprensible, un inmutable
que todo lo mueve.
Nunca nuevo, nunca viejo; todo lo renuevas, pero haces envejecer a los
soberbios sin que ellos se den cuenta. Siempre activo, pero siempre quieto;
todo lo recoges, pero nada te hace falta. Todo lo creas, lo sustentas y lo
llevas a perfección. Eres u nDios que busca, pero nada necesita.
2. Ardes de amor, pero no te quemas;
eres celoso, pero también seguro;
cuando de algo te arrepientes, no te duele,
te enojas, pero siempre estás tranquilo;
cambias lo que haces fuera de ti, pero no cambias consejo.
Nunca eres pobre, pero te alegra lo que de nosotros ganas.
eres celoso, pero también seguro;
cuando de algo te arrepientes, no te duele,
te enojas, pero siempre estás tranquilo;
cambias lo que haces fuera de ti, pero no cambias consejo.
Nunca eres pobre, pero te alegra lo que de nosotros ganas.
No eres avaro, pero buscas ganancias;
nos haces darte más de lo que nos mandas para convertirte en deudor nuestro. Pero, ¿quién tiene algo que no sea tuyo? Y nos pagas tus deudas cuando nada nos debes; y nos perdonas lo que te debemos sin perder lo que nos perdonas.
nos haces darte más de lo que nos mandas para convertirte en deudor nuestro. Pero, ¿quién tiene algo que no sea tuyo? Y nos pagas tus deudas cuando nada nos debes; y nos perdonas lo que te debemos sin perder lo que nos perdonas.
¿Qué diremos pues de ti, Dios mío, vida mía y santa dulzura? Aunque bien
poco es en realidad lo que dice quien de ti habla. Pero, ¡ay de aquellos que
callan de ti! Porque teniendo el don de la palabra se han vuelto mudos.
Tomado y adaptado de "LAS CONFESIONES",-San Agustìn.Libro I.-cap.IV
Comentarios
Publicar un comentario